Hoy nos dirigimos a Cáceres, una verdadera joya de ciudad medieval que se ha conservado casi intacta y que ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Con unos 95.000 habitantes, se sitúa al norte de la provincia de Extremadura y su ubicación en el centro de la península la hace muy accesible desde distintos puntos de España, especialmente desde Madrid.
Para llegar desde la capital, se puede optar por tren con Renfe o autobús con la compañía Avanza, ambos con un tiempo de viaje aproximado de 4 horas.
¿Qué ver en Cáceres?
Cáceres es especialmente conocida por su casco antiguo, formado mayoritariamente por edificaciones medievales. La ciudad también cuenta con una zona más moderna, donde reside la mayor parte de la población y se encuentran tanto la estación de tren como la de autobuses. Para los que visitan la ciudad de paso, conviene saber que en la estación de autobuses hay taquillas disponibles para dejar el equipaje.
Para organizar la visita, recomendamos dividir el recorrido por plazas, ya que en cada una se concentran varios lugares de interés y están relativamente cerca unas de otras.
Plaza Mayor
La visita a Cáceres suele comenzar en la Plaza Mayor, situada en un extremo del casco antiguo. Esta plaza está presidida por el Ayuntamiento, un edificio blanco construido en 1867. Aquí también se encuentra la Oficina de Turismo, ideal para conseguir un plano si no lleváis uno y organizar la ruta de vuestra visita.
En un lado de la plaza hay varios restaurantes, mientras que en el otro destaca la Torre de Bujaco, una torre árabe de 25 metros de altura construida en el siglo XII como parte de la muralla almohade. Durante esa época, los almohades y los cristianos mantenían constantes enfrentamientos por el control de la ciudad. En 1169, el rey Fernando II de León conquistó Cáceres y fundó la orden religiosa y militar de los Fratres de Cáceres, encargados de defender la ciudad ante un posible contraataque musulmán. Tras varios meses de asedio, la ciudad volvió al control árabe en 1173, siendo la Torre de Bujaco el último refugio de los fratres y la última torre en resistir el ataque.
Lo más destacado de la torre son sus vistas panorámicas desde la cima. Subir cuesta 2,5 €, o 3 € si se adquiere la entrada combinada con el Baluarte de los Pozos, del que hablaremos más adelante. El horario de visita es de miércoles a lunes, de 10:00 a 14:00 y de 16:30 a 19:30 en invierno, o de 17:30 a 20:30 en verano.
A la izquierda del Ayuntamiento, si nos situamos frente a él, se encuentra el Foro de los Balbos, un lugar con una historia curiosa. En el siglo XX, aquí se ubicaba un antiguo mercado, que más tarde fue derribado. En 1970 se trasladó a este lugar parte del muro del Puente de San Francisco, que estaba en obras de ampliación. Una de las piezas más destacadas es el Pilar de San Francisco, un abrevadero del siglo XVI donde bebían los animales, que aún se conserva. En él se distinguen tres escudos: los dos laterales son los de Cáceres, mientras que el central pertenece a los Reyes Católicos.
Para continuar hacia la siguiente plaza, debemos salir por el Arco de la Estrella, la principal entrada al interior de la ciudad vieja, rodeada por la muralla desde el siglo XV. Este arco se construyó para sustituir una puerta antigua y permitir el paso de carruajes. Su aspecto actual se debe al arquitecto salmantino Manuel de Larra Churriguera, en el siglo XVIII, y presenta un ligero ángulo para facilitar el giro de los carros de caballos al entrar. En la parte alta del arco, vista desde el interior, se encuentra una escultura de la Virgen de la Estrella, uno de los emblemas de la ciudad. Muchos tours y visitas guiadas comienzan en este punto, y por la noche, con la muralla iluminada, es especialmente bonito de ver.
Una de las fotos más típicas de la plaza suele ser con las letras de Cáceres y la muralla detrás.
Siguiendo recto desde el Arco de la Estrella, llegamos a la Plaza de Santa María, dominada por la imponente Concatedral de Santa María, que atrae todas las miradas. Se trata de la iglesia principal de la ciudad y, en 1957, pasó de ser iglesia a concatedral. Fue construida entre los siglos XV y XVI en estilo gótico. Los horarios de visita y los precios se pueden consultar en su página web.
En la Plaza de Santa María también se encuentran otros edificios importantes. Destaca el Palacio de Ovando, y aún más el Palacio de Carvajal, un edificio gótico construido entre los siglos XV y XVI. Al entrar, se puede ver una maqueta tridimensional del casco antiguo de la ciudad. Además, el palacio alberga varias exposiciones y un bonito patio con una gran higuera. La entrada es gratuita.
El último punto de interés de la plaza se alcanza bordeando la Concatedral por el lado opuesto al Palacio de Carvajal: el Palacio de los Golfines de Abajo. Este palacio es uno de los atractivos principales de Cáceres. En su interior se pueden visitar las diferentes salas de la residencia de la familia nobiliaria de los Golfines, donde se alojaban los Reyes Católicos durante sus visitas a la ciudad. Las visitas son guiadas, no se permite recorrer libremente ni hacer fotos, y duran aproximadamente una hora. Los horarios y precios están disponibles en su página web.
Cabe mencionar también a los Golfines de Arriba, pero se trata únicamente de un restaurante y vivienda privada; no hay acceso al público y se encuentra en otra zona de la ciudad.
Plaza de San Jorge
Junto al Palacio de los Golfines de Abajo se encuentra la Plaza de San Jorge, que recibe su nombre en honor al patrón de la ciudad.
El elemento más destacado de la plaza son las dos altas torres de la Iglesia de San Francisco Javier, un templo jesuita construido en el siglo XVIII en estilo barroco (San Francisco Javier fue uno de los fundadores de la Compañía de Jesús). Es posible visitar el interior de la iglesia por 1,5 €, así como subir a sus torres, desde donde se obtienen algunas de las mejores vistas del casco antiguo de Cáceres, como se aprecia en las fotos de la Concatedral de Santa María que hemos puesto anteriormente.
En el muro de las escaleras, justo a los pies de la iglesia, se encuentra una pequeña estatua de San Jorge, representado a caballo mientras derrota a un dragón.
Fachada de la iglesia de San Francisco Javier
Bajando por la calle frente a la iglesia, a pocos metros encontramos la Casa-Museo Árabe Yusuf al Burch, una auténtica casa almohade del siglo XII. La construcción es original, no una reconstrucción, y ha sido decorada con objetos históricos, donaciones y algunas recreaciones.
La visita resulta muy interesante: una amable guía nos explicó la historia de la casa, así como los distintos objetos y estancias que la componen, incluyendo la sala del té, la sala de armas, el patio y el aljibe. La entrada cuesta apenas 2€, un precio simbólico que contribuye a mantener abierta esta joya histórica al público.
Plaza San Mateo
Otra plaza importante que debemos visitar es la Plaza de San Mateo, donde se encuentra la Iglesia de San Mateo. Esta iglesia, construida en estilo gótico en el siglo XVI, se levantó sobre el terreno que antes ocupaba una mezquita.
Junto a ella se encuentra el Palacio de las Cigüeñas, actualmente sede de la Comandancia Militar de Cáceres, donde se puede visitar el Museo de Armas.
Anexa a esta plaza se halla la Plaza de las Veletas, donde encontramos la Casa de las Veletas, que alberga el Museo de Cáceres. Entre sus salas destacan las de arqueología de distintas épocas y la de etnografía, pero el gran atractivo es su aljibe árabe, que data aproximadamente del siglo XI y formaba parte del antiguo alcázar que existía en este lugar. Es considerado uno de los aljibes mejor conservados de España. La entrada es gratuita para ciudadanos de la Unión Europea.
A pocos metros de la Plaza de las Veletas, en el barrio de la Judería, al límite del casco antiguo, se encuentra el Baluarte de los Pozos. Este pequeño centro alberga una exposición con maquetas de algunos de los principales monumentos de Cáceres. También es posible subir a la Torre de los Pozos, aunque las vistas del casco antiguo son limitadas, ya que se sitúa en la zona más baja de la ciudad.
La entrada individual cuesta 2,5 €, o 3 € si se adquiere junto con la Torre de Bujaco de la Plaza Mayor. Según nuestra experiencia, no vale la pena pagar la entrada por separado; lo más recomendable es optar por la combinación con la Torre de Bujaco.
Plaza de San Juan
La última plaza que vamos a visitar es la Plaza de San Juan, situada fuera del recinto amurallado de Cáceres. Debe su nombre a la Iglesia de San Juan Bautista, construida en estilo gótico en el siglo XIII. A lo largo de los siglos ha sufrido varias reformas, y no fue completada definitivamente hasta el siglo XVIII.
Además de la iglesia, la plaza es conocida por una escultura muy apreciada por los locales: la estatua de Leoncia Gómez, quien fue la última vocera de El Periódico de Extremadura en Cáceres. De hecho, fue la única mujer que desempeñó este oficio en dicho periódico, comenzando su carrera a los 63 años de edad.
¿Dónde comer en Cáceres?
Al visitar Cáceres no podéis dejar de probar algunos de sus platos típicos: migas, jamón ibérico de bellota (Extremadura es famosa por su producción de bellota, que alimenta a los cerdos), morcilla patatera (una mezcla de grasa de cerdo ibérico, patatas y pimentón que se suele untar como la sobrasada), secreto de cerdo ibérico y torta del Casar, un queso cremoso elaborado con leche cruda de oveja y cuajo vegetal obtenido del cardo, que le da su textura única.
Cáceres cuenta con numerosos restaurantes recomendados y conocidos, y muchas veces la elección dependerá de la disponibilidad: los fines de semana encontrar mesa puede ser complicado, pero con paciencia hay varias opciones excelentes.
- Nosotros comimos en la Torre de Sande, junto a la Plaza de San Mateo: ofrecen generosas tapas y buena comida a precio razonable. Tienen mesas en la calle, en el interior e incluso en un jardín, siendo las de la calle y el jardín las más solicitadas.
- También comimos en Bar La Tapería, junto a la Plaza Mayor: otro local muy conocido, con buena comida y precios asequibles.
- La Cacharrería, uno de los lugares más destacados, pero hay que tener mucha suerte para conseguir mesa, ya que las colas suelen ser largas.
- Restaurante Tapería Ibérico, en la Plaza de San Juan: perfecto para degustar clásicos de la región como torta del Casar, cochinillo ibérico o morcilla patatera, entre otros.
Para desayunar, la Cafetería Chocolat’s es una excelente opción, con dulces caseros como croissants, napolitanas y tostadas variadas.
Si queréis llevar productos locales a casa, hay muchas tiendas que ofrecen degustaciones de quesos y embutidos, y luego podéis comprar los que más os gusten. Una de las más céntricas se encuentra en la Plaza Mayor, cerca de la calle que sube al casco antiguo bajo el Arco de la Estrella.
Si queréis llevar productos locales a casa, hay muchas tiendas que ofrecen degustaciones de quesos y embutidos, y luego podéis comprar los que más os gusten. Una de las más céntricas se encuentra en la Plaza Mayor, cerca de la calle que sube al casco antiguo bajo el Arco de la Estrella.
Excursiones desde Cáceres
Excursiones desde Cáceres hay un montón, todas muy distintas y para todos los gustos.
- El Parque Nacional de Monfragüe, situado en un entorno natural espectacular sobre el río Tajo, es un lugar ideal para la observación de aves, especialmente buitres, águilas y cigüeñas. Para aprovechar la visita, lo recomendable es comenzar en el pueblo de Villarreal de San Carlos, donde se encuentra el centro de visitantes. Desde allí, podéis acercaros al mirador del Salto del Gitano y subir al castillo de Monfragüe, desde donde se obtienen vistas impresionantes del parque y de la fauna que lo habita. ¡No os olvidéis los prismáticos!
- Plasencia, un pueblo a 80 kilómetros con un bonito y animado casco antiguo.
- Valle del Jerte: lugar ideal para visitar en abril y ver los cerezos en flor. Se pueden ver en las carreteras que unen pueblos como Casas del Castañar y Piornal.
- Comarca de la Vera. El pueblo más bonito es Garganta la Olla, podéis partir de este lugar y visitar la zona donde se hace el pimentón más famoso de España.
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