Versalles

Una de las excursiones más habituales desde París es la del Palacio de Versalles (Château de Versailles), Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde 1979, sobre todo para aquellos interesados en la historia de Francia y la realeza.

Yendo tranquilamente, es una excursión que lleva un día, aunque si vais a primera hora, podéis estar de vuelta en París por la tarde y seguir viendo cosas.

¿Cómo llegar al Palacio de Versalles?

Existen varias combinaciones de transporte público para ir de París hasta Versalles, dependiendo de dónde estéis alojados. Una de ellas es con el tren RER C, que pasa por estaciones como Invalides o Musée d’Orsay y llega a la parada Versailles-Château. Aquí podéis ver todas las paradas de la línea.

Otra opción es con el tren Transilien de la línea N, que sale desde la Gare Montparnasse, hasta la parada Versailles-Chantiers y, desde ahí, tomar el bus 171 o caminar hasta el palacio, pues hay unos 2 kilómetros desde dicha estación.

Lo más cómodo es mirar en la aplicación de mapas y ver qué opción os ofrece, ya que, seguramente, será la más rápida. El precio es de 2,5€ por trayecto, y está incluido en el pase semanal (Navigo decouvert) si lo tenéis.

¿Cómo visitar el Palacio de Versalles?

Es una de las atracciones más turísticas de Francia, por lo que la visita puede resultar un tanto agobiante, pues las salas no son muy grandes y con tantos tours, asiáticos y europeos, hay algunas partes donde apenas hay espacio para ver tranquilamente las cosas.

Al palacio se puede meter botellas de agua y algún tentempié en la mochila, aunque no comer ni beber en las salas. Para comer, las opciones son: comprarse un bocadillo en París o en Versalles ciudad y llevarlo en el bolso, comer en la cafetería que hay en el interior del palacio (Grand Café d'Orléans) o en alguno de los restaurantes que hay en los alrededores del palacio, aunque ya sabéis que estas serán las opciones más caras.

Los tickets para el palacio se agotan rapidísimamente, por eso es imprescindible reservar un horario. Si tenéis el Paris Museum Pass, se recomienda reservar una franja horaria, pero si no, no pasa nada, podéis presentaros espontáneamente y adquirir un ticket gratuito en las taquillas que hay a la izquierda del Patio de Honor, pues la visita está incluida en el pase.

Para los que tengan el Paris Museum Pass, aquí podéis ver cómo reservar la hora, y para los que vayan por libre, en su página web oficial podéis comprar los tickets con antelación y ver los horarios de apertura. Cuidado que cierra los lunes. El coste de la audioguía, si queréis, es de 5€.

Si solo queréis ver el palacio principal, podéis comprar el ticket del palacio, pero por muy poco más, merece la pena comprar la entrada conjunta que te da acceso también a los dos palacios de Trianón. 

¿Qué ver en el Palacio de Versalles?

El Palacio de Versalles comenzó siendo el antiguo pabellón de caza de Luis XIII de 1623, que fue reformado y ampliado por su hijo, Luis XIV el «Rey Sol», quien, además, movió allí la corte y su gobierno en 1682. Desde entonces y hasta 1789, toda la monarquía francesa residió en Versalles, es decir, Luis XIV y su mujer, la española María Teresa de Austria y Borbón; Luis XV, su mujer, la polaca María Leszczyńska e incluso su amante, la famosa Madame du Barry; y Luis XVI y su esposa, la austriaca María Antonieta. Al estallar la Revolución Francesa, los reyes del momento, Luis XVI y María Antonieta, fueron obligados a huir del palacio e instalarse en el Palacio de las Tullerías de París, hasta que fueron ejecutados en la guillotina en 1793. Pasada la Revolución Francesa y a pesar de la reinstauración de la monarquía en 1830 de la mano del rey Luis Felipe, el palacio ya nunca más serviría como residencia real, sino que pasó a ser un Museo de Historia de Francia en 1837, con esculturas y cuadros significativos y de gran importancia para el país.

El palacio, en realidad, es un enorme complejo con varios palacios y jardines. Nada más llegar, una enorme explanada que recibe el nombre de Plaza de Armas (place d'Armes) precede al palacio. En ella vemos una estatua ecuestre de Luis XIV (Statue équestre de Louis XIV) y los dos majestuosos edificios de las Grandes caballerizas (Grande Écurie) y las Pequeñas caballerizas (Petite Écurie), construidas en 1682 para albergar los caballos y carruajes de la corte, así como escuela de formación militar y de caballería.

Palacio de Versalles visto desde la Plaza de Armas

Al cruzar la verja azul y dorada que pone fin a la plaza, vemos una sucesión de tres patios. El primero se llama Patio de Honor (cour d'honneur); el segundo, Patio Real (cour royale); y el tercero, con un suelo de mármol negro y blanco y separado por unos pequeños escalones, es el Patio de Mármol (cour de Marbre), que era el patio del castillo original, del de Luis XIII.

Empezaremos el recorrido interior por el Palacio (Le Château), que tiene forma de U rodeando los patios anteriores. Tiene dos plantas principales. El palacio viejo de Luis XIII es el del lado este, el resto, incluidas varias partes de ese sector este, es la parte nueva, construidas por Luis XIV.

Plano del Palacio de Versalles

En el Palacio Viejo (Château Vieux) de Luis XIII se encuentran los Apartamentos privados del Rey (Appartement du Roi y Petit Appartement du Roi) y de la Reina (Petit Appartement de la Reine). Los Apartamentos del Rey están ubicados en el primer piso frente al patio de mármol y consisten en:

• Vestíbulo (Vestibule).
• La sala de guardia (Salle des gardes du roi), donde se alojaba la guardia personal del rey.
• Primera antecámara (Première antichambre)
• Antecámara de ojo de buey (Salon de l'œil de bœuf), nombre que proviene de la ventana del techo. Era la principal del dormitorio del rey.
• Cámara del rey (Chambre du roi). En 1701, Luis XIV remodeló esta sala para convertirla en su dormitorio, con un balcón que daba al patio de mármol y tres puertas que conducían a la Galería de los Espejos. Esta era la sala más importante de los apartamentos del rey, donde el monarca dormía y donde el servicio hacía las ceremonias de acostarse y levantarse, todos los días. Luis XIV murió en esta sala el 1 de septiembre de 1715 tras un reinado de 72 años.
• Gabinete del consejo (Cabinet du conseil), lugar de reunión del consejo del rey.

Cámara del rey

El gabinete del consejo da paso a la Galería de los Espejos (Galerie des Glaces), la sala más espectacular de todo el palacio. Se construyó entre 1678 y 1684 en estilo barroco en el lugar que antes ocupaba una terraza. Mide 73 metros de largo, con 17 ventanas y 357 espejos a ambos lados de la galería, que en aquella época eran artículos de lujo, siendo Venecia la principal productora. El pintor Charles Le Brun fue el encargado de decorar el techo abovedado, y lo hizo con un enorme mural donde se ilustra momentos significativos del reinado de Luis XIV. En esta sala se firmó el 28 de junio de 1919 el histórico Tratado de Versalles que ponía fin a la Primera Guerra Mundial. Posteriormente, la sala se siguió usando para recibir (e impresionar) a jefes de estado extranjeros en su visita al país, como la reina de Inglaterra Isabel II en 1957 o el presidente de EE.UU. John Fitzgerald Kennedy en 1963.

Galería de los Espejos

En ambos extremos de la Galería de los Espejos tenemos dos salas más, el Salón de la Guerra y el Salón de la Paz. El Salón de la Guerra (Salon de la Guerre) se construyó en 1678 y está decorado por Charles Le Brun, quien quiso representar las victorias militares francesas que pusieron fin a la Guerra franco-neerlandesa (1672-1678) con la firma del Tratado de Paz de Nimega (1678). El Salón de la Paz (Salon de la Paix) es similar al de la Guerra, con la misma decoración incluso, pero diferentes motivos en las pinturas de Le Brun. Esta sala pertenece al Gran Apartamento de la Reina así que hablaremos de ella más abajo.

Pasamos ahora a lo que se conoce como palacio nuevo (Château Neuf), que era la ampliación que llevó a cabo Luis XIV con respecto al palacio original de Luis XIII.

En el palacio nuevo se encuentran los Apartamentos de Estado, también llamados Grandes Aposentos o Grandes Apartamentos (Grands Appartements), que eran los nuevos apartamentos para los reyes construidos por Luis XIV en la ampliación. Estaban compuestos por el Gran Apartamento del Rey (Grand Appartement du Roi) y por el Gran Apartamento de la Reina (Grand Appartement de la Reine). El plan original era que los Apartamentos de Estado del rey estuvieran conformados por siete habitaciones seguidas, cada una dedicada a un planeta y a su dios romano asociado:

→Salón de Diana. Diana, diosa romana de la caza y hermana de Apolo; asociada con la Luna. Esta sala servía como vestíbulo de los Apartamentos de Estado, así como sala de billar durante el reinado de Luis XIV. La pintura central del techo está dedicada a la diosa Diana y el tema general de las decoraciones de la sala es la caza.

→Salón de Venus. Venus, diosa romana del amor; asociada con el planeta Venus. Esta sala, igual que la de Diana, servía como entrada al apartamento del rey y la pintura del techo representa a Venus. En época de Luis XIV, el monarca puso aquí mesas comida y la bebida para que los invitados se sirvieran a modo de buffet. En el plan original el Salón de Venus se ubicaba junto al de Júpiter y Saturno, pero los tres fueron eliminados para la construcción de la Galería de los Espejos, y el mobiliario de aquella sala de Venus fue movido al actual Salón de Venus.

→Salón de Marte. Marte, dios romano de la guerra; asociado con el planeta Marte. Primeramente sirvió como sala de guardias, que venía muy a cuento dado que el dios venerado era el de la guerra y, más tarde, también como salón de bailes. En el centro del techo hay una pintura de Claude Audran en la que se ve al dios Marte en un carro tirado por lobos. En las paredes laterales hay dos retratos de Estado de Luis XV y María Leszczyńska.

→Salón de Mercurio. Mercurio, dios romano del comercio y las artes liberales; asociado con el planeta Mercurio. Originalmente fue concebida como dormitorio del rey, pero apenas se usó nunca para ello, Luis XIV prefería sus pequeños apartamentos y esta sala acabó siendo sala de juegos. La cama que hay actualmente en la habitación fue traída aquí por el rey Luis Felipe cuando el palacio pasó a ser el museo de Historia de Francia. A ambos lados de la cama cuelgan dos cuadros: David tocando el arpa, de Domenico Zampieri, y San Juan en Patmos, de Rafael.

→Salón de Apolo. Apolo, dios romano de las bellas artes y de la paz; asociado con el Sol. El salón de Apolo sirvió como dormitorio del rey de 1673 a 1682, y cuando Luis XIV movió la corte a Versalles, decidió que se utilizaría como sala del trono, donde se celebraban las audiencias. La pintura del techo muestra al dios Apolo en su carro tirado por cuatro caballos. Sobre la chimenea se encuentra el retrato más famoso de Luis XIV, de Hyacinthe Rigaud. Se trata de una copia que hizo el autor del mismo cuadro que se expone en el Louvre, que originalmente iba a ir a Madrid por petición de Felipe V, nieto de Luis XIV, pero que, al final, gustó tanto a Luis XIV que decidió quedárselo y enviar uno nuevo y un tanto distinto a Madrid. El cuadro que vemos aquí es una tercera copia del mismo cuadro, de 1702.

Sala Apolo y el retrato de Luis XIV a la derecha

→Salón de Júpiter. Júpiter, dios romano de la ley y el orden; asociado con el planeta Júpiter. Esta sala fue eliminada para la construcción de la Galería de los Espejos.

→Salón de Saturno. Saturno, dios romano de la agricultura y la cosecha. Esta sala fue eliminada para la construcción de la Galería de los Espejos.

En el siglo XVIII, durante el reinado de Luis XV, el gran apartamento del rey se amplió para incluir el salón de la Abundancia, que antes era el vestíbulo de entrada del pequeño apartamento del rey, y el salón de Hércules, donde estaba la segunda planta de la antigua capilla.

→El Salón de la Abundancia (salon de l'Abondance) servía como sala de estar y de refrigerios, donde los invitados podían beber algo en los eventos o fiestas que organizaba el rey. Se encuentra entre el Salón de Venus y el Salón de Hércules.

→El Salón de Hércules (Salon de l'Hercule) conecta la capilla real con el gran apartamento del rey. Fue la última sala que construyó Luis XIV. La perla de la decoración es el cuadro de Paolo Veronese, La cena en casa de Simón (Cena in casa di Simone il fariseo), una serie que cuenta con varios cuadros similares (hay otros en la Pinacoteca di Brera en Milán, en la Galleria Sabauda de Turín, etc.). Este cuadro estuvo también durante un tiempo en el Louvre. El nombre de la sala proviene de la impresionante pintura del techo, Apoteosis de Hércules (Apothéose d'Hercule), de François Lemoyne, donde hay 142 personas representadas.

Salón de Hércules

Además del Gran Apartamento del Rey, como decíamos, los Apartamentos de Estado o Grandes Aposentos también incluían el Gran Apartamento de la Reina, donde se alojaron, cada una en su tiempo, las tres reinas de Francia: la española María Teresa de Austria y Borbón, esposa de Luis XIV; la polaca María Leszczyńska, esposa de Luis XV; y la austriaca María Antonieta, esposa de Luis XVI.

El Gran Apartamento de la Reina se encuentra también en el primer piso, en el ala opuesta al del rey, envolviendo, por así decirlo, al palacio original. Este apartamento constaba originalmente de 7 habitaciones (homólogas a las 7 habitaciones de los planetas del rey): la capilla (chapelle), sala de guardias (salle de gardes), antecámara (antichambre), la cámara o dormitorio (chambre), el gran gabinete (grand cabinet), el oratorio (oratoire), y el pequeño gabinete (petit cabinet). Sin embargo, con las reformas de 1678, que incluían la creación de la Galería de los Espejos, el gran apartamento de la reina perdió alguna de sus salas, como el gran gabinete que pasó a ser el Salón de la Paz, el oratorio y el pequeño gabinete, para ganar espacio para la galería. Con esto, el apartamento de la reina se redujo a cinco salas:

→Salón de la Paz (Salon de la Paix). La primera sala que veremos será la de la Paz, que da directamente a la Galería de los Espejos. Esta sala la usaban las reinas como sala de juegos y de reunión con amigas. Aquí fue donde María Antonieta jugaba y apostaba, haciendo que perdiera ingentes sumas de dinero (público, lógicamente).

→Dormitorio de la reina (chambre de la reine). Esta es la sala más importante del apartamento de la reina, con la elegante cama coronada con la figura del gallo, símbolo de Francia. Si os fijáis bien, detrás del tapiz que hay detrás de la cama, hay dos puertas ocultas que llevaban a otras pequeñas salas del pequeño apartamento de la reina (petit appartement de la reine). La decoración original tenía elementos de las tres reinas que durmieron en este apartamento: la parte del techo, de María Teresa de Austria y Borbón; las pinturas, de María Leszczyńska; y el mobiliario, de María Antonieta. Sin embargo, al igual que sucedió con muchas salas del palacio, durante la Revolución Francesa, este dormitorio se saqueó y no quedó absolutamente nada, lo que vemos hoy son réplicas, con algunas excepciones que se lograron recuperar.

Cama del dormitorio de la reina

→Gran gabinete, antigua antecámara. El gran gabinete, también llamado salón de los Nobles (salon des Nobles), era la sala de audiencias de la reina.

→Antecámara del Gran Comedor (antichambre du Grand Couvert), antigua sala de la guardia de la reina. Lo que era la sala de guardia en tiempos de María Teresa de Austria y Borbón, pasó a ser, tras la reforma, un comedor donde Luis XIV y María Antonieta, así como el resto de familia real, cenaban habitualmente. Todo el mobiliario se lo llevaron durante la Revolución Francesa, lo que vemos actualmente fue donado posteriormente y reamueblado de manos de un experto para que luzca lo más parecido a como se cree que era. En esta sala hay también un cuadro histórico: María Antonieta y sus hijos (Marie-Antoinette et ses enfants). En 1787 la popularidad y aprecio de la reina entre la población francesa estaba por los suelos, así que su marido, el rey Luis XVI hizo que pintaran un cuadro simpático, donde la reina saliera sin apenas joyas y que mostrara una versión más humana, cercana y familiar. María Antonieta tuvo cuatro hijos en vida: María Teresa en 1778, Luis José en 1781, Luis Carlos de Borbón en 1785 y Sofía en 1786. Cosas del destino, solo su primogénita, María Teresa, la que vemos a la izquierda de la pintura, llegaría a la mayoría de edad. Luis José, el delfín de Francia (iba a ser el futuro rey), murió con 8 años de tuberculosis, igual que su hermano menor, Luis Carlos de Borbón, que falleció a los 10 años a consecuencia de la misma enfermedad. Sofía, la pequeña, falleció a los 11 meses. El cuadro muestra a los tres hijos mayores, con Luis José señalando la cuna donde solía estar su hermana menor, Sofía, que acababa de morir poco antes de que se completara el cuadro.

Cuadro María Antonieta y sus hijos en la Antecámara del Gran Comedor

→Sala de las guardia de la reina (salle des gardes de la reine), antigua capilla. La capilla dio paso a un salón, llamado inicialmente salón de la Reina y posteriormente sala de la Guardia. Aquí se situaba la guardia que debía vigilar el Gran Apartamento de la Reina.

→Sala de la Coronación (Salle du Sacre). Junto a la sala anterior, aunque no pertenece oficialmente al Gran Apartamento de la Reina, encontramos la Sala de la Coronación, lugar donde antiguamente estaba la segunda capilla, que en 1682 se movió a otro emplazamiento y esta sala se usó como gran sala de la guardia. Ya en época del rey Luis Felipe, en 1833, se convirtió en Sala de la Coronación, en honor a Napoleón Bonaparte. Aquí se expone el impresionante cuadro de Jacques-Louis David La coronación de Napoleón (Le Sacre de Napoléon), donde se muestra la coronación de Napoleón y su mujer Josefina en emperadores, que tuvo lugar en la Catedral de Notre Dame en 1804. Esta pintura es una réplica de 1822 del cuadro original, que se encuentra en el Louvre.

Sala de Coronación

Otras partes importantes que ver en la visita:

• Capilla Real (Chapelle Royale). Se trata de la quinta que ha habido en la historia del palacio, construida entre 1699 a 1710 y que mezcla estilos góticos y barrocos.
• Ópera Real (Opéra Royal). Un hermoso teatro de madera que se inauguró en 1770 entre delfín (el futuro Luis XVI) y María Antonieta. Delfín de Francia (Dauphin de France) era el título que recibía el príncipe heredero al trono.
• Museo de la Historia de Francia (Musée de l'Histoire de France). El rey Luis Felipe, en 1837, hizo demoler una serie de salas del palacio para construir este museo en honor a la historia del país. Esta parte incluye la Sala de Coronación, donde se puede ver el cuadro de la coronación de Napoleón I, del artista francés Jacques-Louis David; la Galería de las Batallas, una espectacular sala donde se exponen grandes cuadros de las batallas más importantes de la historia de Francia donde estos salieron victoriosos; y la sala de 1830, que conmemora la llegada al trono del rey Luis Felipe tras la Revolución Francesa de 1830.

Galería de las Batallas

Hasta aquí, lo más importante y destacado del Palacio. Dicho esto, todo lo anterior se encuentra en la primera planta del palacio, hay muchas otras salas y partes en la planta baja que son también interesantes para ver, como la Galería de Historia del Palacio, los Apartamentos del Delfín y de la Delfina, y los Apartamentos de las hijas de Luis XV. Si vuestro plan es dedicarle todo el día al palacio y descubrir cada rincón, sin duda tenéis que visitarlos.

La visita del palacio principal nos llevó unas 3 horas. Salimos del edificio para dar un paseo por los jardines de Versalles. Desde la Galería de los Espejos se tiene una buena posición para ver la inmensidad de estos. Una de las partes más bonitas de los jardines es el Gran Canal, con forma de cruz y construido en 1679 por André Le Nôtre, el jardinero oficial de Luis XIV. Podéis alquilar una barquita para dar un paseo por el lago.

Jardines de Versalles y Gran Canal al fondo

¿Qué ver en el Gran Trianón?

Siguiendo el Gran Canal y girando a la derecha, llegamos a la otra parte del palacio, el dominio palaciego de Trianón, que incluye el Gran Trianón (Grand Trianon) y el Pequeño Trianón (Petit Trianon), que, recordemos, requieren una entrada independiente. Hay un camino de unos 20 minutos andando desde el Palacio de Versalles, así que se pueden alquilar cochecitos tipo los de golf para ir de un sitio a otro y recorrer los jardines, por si tenéis dificultades o simplemente estáis cansados.

Gran Trianón

Trianón era un pueblo que se hallaba en este lugar, hasta que Luis XIV lo compró en 1665 para ampliar los terrenos del Palacio de Versalles. Tras destruir el pueblo, construyó en 1672 una serie de pabellones decorados con azulejos, recibiendo el nombre de Trianón de Porcelana.

El Gran Trianón es un palacio con decoración barroca muy influenciado por la arquitectura italiana, con un patio en la parte delantera y unos jardines al otro. Fue construido entre 1687 y 1688 en el lugar del antiguo Trianón de Porcelana que se había desgastado demasiado rápido, en este caso con un exterior hecho de mármol rosa, motivo por el cual se le llamó Trianón de Mármol hasta que se construyó el otro Trianón (Pequeño Trianón) y este pasó a llamarse Gran Trianón para evitar confusiones. Se erigió originalmente como un área de descanso y retiro para Luis XIV, si bien más tarde fue utilizado por María Leszczynska, esposa de Luis XV, especialmente en los meses de verano. También su padre, el rey Estanislao I de Polonia, se alojó aquí cuando estuvo de visita en Versalles.

La parte más bonita, con excepción de alguna sala interior, es el peristilo o galería de columnas que hay en el centro del edificio, separando el patio llamado patio de honor (cour d'honneur), a un lado, y los jardines, al otro.

Patio del Gran Trianón

La decoración interior es casi toda original, pero el mobiliario original fue saqueado durante la Revolución Francesa. El palacio tiene varias partes. Por un lado, está el apartamento de la emperatriz, compuesta de las siguientes salas:

• La habitación de la emperatriz (La chambre de l’Impératrice). Fue originalmente la habitación de Luis XIV y, más tarde, de la emperatriz María Luisa, la segunda esposa de Napoleón Bonaparte, pues ambos quisieron redecorar el palacio después de que quedara vacío por los saqueos y utilizarlo ocasionalmente. La decoración actual trata de asemejarse a cómo era el dormitorio de la emperatriz. Como curiosidad, la cama es la que tenía Napoleón en el Palacio de las Tullerías.
• El salón de los espejos (Le salon des Glaces). Se trata de la versión reducida de la Galería de los Espejos del Palacio de Versalles y, tal y como le sucede a su hermana mayor, es la sala más bonita. Luis XIV la usó como sala de reunión del consejo.
• El salón de la capilla (Le salon de la Chapelle). Como su propio nombre indica, era la sala donde se situaba la capilla. Actualmente podemos ver dos cuadros de Luis XV y María Leszczyńska.

Habitación de la emperatriz del Gran Trianón

En el lado derecho del peristilo tenemos otra ala, conocida como el gran apartamento (le grand appartement), compuesto de las siguientes salas:

• La sala redonda (Le salon Rond), utilizada originalmente como vestíbulo del primer apartamento que Luis XIV.
• La sala de música (Le salon de Musique), antesala donde cenaba el rey Luis XIV, y el rey Luis Felipe la convirtió en una sala de billar.
• El salón familiar de Luis Felipe (Le salon de famille de Louis-Philippe), una sala construida por el rey Luis Felipe, quien fusionó dos habitaciones anteriores para crear una gran sala de estar para su familia.
• El salón de los Malaquitas (Le salon des Malachites), decorada con regalos del zar Alejandro I de Rusia a Napoleón Bonaparte.
• El salón fresco (Le salon Frais), llamado así porque miraba al norte (la orientación que menos sol recibe).
• La galería de los Cotelle (La galerie des Cotelle), una galería decorada con varios cuadros que representan los bosques y jardines de Versalles, obra del artista Jean Cotelle, de ahí el nombre de la sala.
• El salón de los jardines (Le salon des Jardins), ubicada en un extremo de la galería de los Cotelle.

La última parte es el apartamento interior del emperador, compuesto de cinco salas:

• El gabinete topográfico del emperador (Le cabinet topographique de l’Empereur).
• La antecámara (L’antichambre).
• El gabinete privado (Le cabinet particulier).
• El cuarto de baño (La salle de bains).
• La habitación del emperador (La chambre de l’Empereur), habitación del rey Luis XV, creada en 1750.
• El salón del desayuno (Le salon du Déjeun). Originalmente, era la sala donde cenaba Luis XIV, más tarde Luis XV la remodeló y, finalmente, Napoleón la convirtió en una sala para tomar el desayuno.

El edificio está abierto al público, aunque se usa puntualmente para para recepciones de jefes de estado y actos oficiales. El Gran Trianón abre a las 12:00, pues 3 horas es lo que se tarda más o menos en visitar el palacio principal, que abre a las 9 de la mañana, antes de poder llegar al Gran Trianón. El pequeño Trianón también tiene el mismo horario. Cierran a las 18:30.

¿Qué ver en el Pequeño Trianón?

Muy cerca del Gran Trianón se encuentra el Pequeño Trianón. Este se construyó en estilo neoclásico en 1968 por orden de Luis XV y fue estrenado por su amante o, como los franceses de la época se referían a esa figura, la favorita, Madame du Barry. Curiosamente, estaba destinado para la anterior favorita del rey, Madame de Pompadour, pero falleció antes de que este estuviera terminado. Tras la muerte del delfín o príncipe heredero Luis Fernando de Borbón, hijo de Luis XV y María Leszczyńska, el sucesor al trono, Luis XVI, es decir, nieto de Luis XV, decidió regalarle este palacio a María Antonieta, su esposa. Ella lo convirtió en su espacio personal que le permitiera alejarse de las costumbres y obligaciones de palacio.

María Antonieta es uno de los personajes más célebres de Versalles. Hermana del emperador austriaco José II, llegó a Versalles con tan solo 14 años para contraer matrimonio con el, por aquel entonces, delfín de Francia, el futuro Luis XVI, con el objetivo de unir a dos potencias que habían vivido enfrentadas: Austria y Francia. Lo cierto es que nunca se llegó a ganar al pueblo, nunca mostró interés alguno por Francia y su gente, tuvo fases de obsesión por la moda y por el juego y, poco a poco, se ganó la antipatía de la población, quienes la llamaban «la austríaca» o «Madame Déficit», por sus derroches en vestidos y lujos innecesarios, y la acusaban de mantener relaciones con amantes, tanto mujeres como hombres.

Además de María Antonieta, más tarde vivieron otras mujeres, como la emperatriz María Luisa, segunda esposa de Napoleón Bonaparte, Elena de Mecklemburgo-Schwerin, esposa del rey Luis Felipe y la española Eugenia de Montijo, esposa del emperador Napoleón III.

El Pequeño Trianón es considerablemente más reducido que el Gran Trianón, y consta de 3 plantas. La de abajo era usada por el servicio, por eso es donde se encuentra la cocina, la despensa y una sala de platería, así como una sala de billar. En la primera planta hay una serie de salones y gabinetes, y el apartamento de la reina. En la segunda y última planta encontramos varias habitaciones para invitados y una suite para el rey.

Pequeño Trianón