Hannover, con poco más del medio millón
de habitantes, es la capital del estado federado de Niedersachsen (Baja Sajonia).
Hannover es una perfecta opción para
hacer una excursión desde Hamburgo (a 2 horas en bus) o desde Berlín (a 3 horas
en bus) ya que es una ciudad grande con suficientes cosas para ver en un día,
si bien es cierto que no brilla tanto como sus vecinas Hamburgo o Bremen.
Frente a la estación central de trenes
(Hauptbahnhof) se encuentra la oficina de turismo donde puedes conseguir un
mapa de la ciudad para ver lo más importante. Lo bueno que tiene Hannover es la llamada “Línea Roja” –Roter Faden en alemán–, una línea trazada en medio de la
calzada que recorre la ciudad pasando por las principales atracciones
turísticas.
Como muchas otras ciudades alemanas,
Hannover quedó destrozada tras la Segunda Guerra Mundial, por eso no vamos a
encontrar muchos monumentos importantes. El bombardeo de Hannover tuvo lugar en
1943 tras ataques aéreos británicos y estadounidenses, con un total de 125
ataques y más de 6000 víctimas.
Un dato curioso es que en Hannover y alrededores se habla el llamado Hochdeutsch, algo así como el alemán más puro de todo el país. Esto quiere decir que es el alemán que más y mejor se ajusta a las reglas estipuladas en los diccionarios sobre cómo pronunciar sonidos y palabras de esta lengua.
¿Qué ver en Hannover?
Por tanto, lo que vamos a hacer es seguir la Línea Roja que parte de la oficina de turismo que se encuentra frente a la estación central (Hauptbahnhof).
La primera atracción importante que nos encontraremos será la Ópera de Hannover (Opernhaus), terminada en 1852. Fue reconstruida en 1950 tras ser completamente destrozada durante la guerra.
Dejando atrás la ópera, llegaremos a las ruinas de Aegidienkirche. Son los restos de la iglesia de San Gil (siglo XIV), la cual fue bombardeada en 1943 y se decidió por no reconstruirla.
La primera atracción importante que nos encontraremos será la Ópera de Hannover (Opernhaus), terminada en 1852. Fue reconstruida en 1950 tras ser completamente destrozada durante la guerra.
Dejando atrás la ópera, llegaremos a las ruinas de Aegidienkirche. Son los restos de la iglesia de San Gil (siglo XIV), la cual fue bombardeada en 1943 y se decidió por no reconstruirla.
Ruinas de la iglesia Aegidienkirche
A continuación llegamos al principal icono de Hannover, el Ayuntamiento nuevo (Neues Rathaus), construido en 1913. El edificio es asombroso y está rodeado además de jardines y un lago. Dentro de él hay cuatro maquetas de Hannover en distintas épocas, lo que te da una visión de cómo ha evolucionado la ciudad y cómo quedó tras la Segunda Guerra Mundial.
Además, por un precio de 3,5€ se puede subir en ascensor a la cúpula y así obtener unas buenas vistas de la ciudad y del lago Maschsee desde las alturas. El elevador es algo único pues está inclinado 17 grados.
Ayuntamiento nuevo
Seguiremos nuestro camino para ver las Nanas de Niki de Saint Phalle (1974),
unas sugerentes esculturas coloridas de gran tamaño de la artista francesa Niki
de Saint Phalle. Su intención era representar la feminidad y maternidad de la
mujer. Estas nanas también se pueden encontrar en el museo Guggenheim de Bilbao.
Esculturas Nanas de Niki de Saint Phalle
La siguiente parada es el Ayuntamiento viejo (Altes Rathaus), que data de 1410 aunque fue reconstruido y remodelado varias veces más. Está ubicado en la Marktplatz (plaza del mercado).
Ayuntamiento viejo
En esa misma plaza, veremos también la "iglesia del Mercado" (por estar ubicada en la plaza del mercado), Marktkirche St. Georgii et Jacobi. Esta iglesia luterana data del siglo XIV y tiene una altura de 97 metros en su punto más alto, la torre.
Continuamos paseando por el casco antiguo y haremos una parada en el Leineschloss, un palacio del siglo XII, hoy en día sede del Parlamento del estado de Baja Sajonia. Lógicamente se trata nuevamente de una reconstrucción pues fue destruido a causa de un incendio casi en su totalidad durante la Segunda Guerra Mundial. Especialmente llamativo es el puente Leineschlossbrücke que hay en una de las fachadas del palacio.
A escasos 300 metros del palacio veremos una de las plazas más bonitas del casco antiguo, la Ballhofplatz, rodeada de casas de entramado típicas alemanas. Es el lugar ideal para relajarse y tomar un café y tarta. En la plaza destacan el teatro Ballhof que da nombre a la misma y la Ballhofbrunnen que es la curiosa fuente con tres bolas que veremos en el centro de la plaza.
Esta zona entre la Ballhofplazt, la iglesia del mercado y la calle Kramerstraße es de lo más animado del centro.
Cerca de la Ballhofplazt destaca también la Kreuzkirche, la iglesia más antigua de Hannover, construida en el año 1333. Merece la pena entrar en su interior para visitar el altar de Lucas Cranach, del siglo XVI.
El tour de la Línea Roja finaliza de nuevo en Hauptbahnhof. Nosotros hemos destacado las cosas más importantes de la ciudad, si bien es cierto que la Línea Roja pasa por otras atracciones como museos varios y alguna iglesia de menor relevancia.
Una última parada totalmente recomendable es los jardines de Herrenhäuser (Herrenhäuser Gärten), unos jardines barrocos kilométricos espectaculares. Al estar más alejados del centro de la ciudad, no forman parte del recorrido de la línea roja. Está formada por dos jardines principales Großer Garten (Gran Jardín), Berggarten (en él se encuentra el jardín botánico) y dos más pequeños de estilo inglés (Georgengarten y Welfengarten). Evidentemente son de pago. Se puede llegar fácilmente en U-Bahn hasta la estación Herrenhäuser Gärten.
Más alternativas
En el lago Maschsee, lago artificial de 78
hectáreas en Hannover, tiene lugar la Maschseefest (fiesta del lago Maschsee).
Este festival, de aproximadamente tres semanas de duración, se celebra cada
verano en los paseos marítimos de todo el lago. Consta de actividades de todo
tipo: conciertos, bailes, disfraces, puestos de gastronomía, etc.
Si te gusta el fútbol, puede ir a visitar el estadio del equipo local (HDI Arena), el Hannover 96, si bien está rodeado de árboles y no tiene buenas vistas. Lo único positivo es que está al lado de Lago Maschsee, así que se puede ver medio de paso.
Aquí murió Gottfried Wilhelm Leibniz,
filósofo matemático (entre otros) alemán, famoso por inventar el sistema
binario. Una escultura cerca de la Ópera recuerda este acontecimiento.
Excursiones
Si vas a hacer una visita a Hannover, lo más recomendable es que dediques un par de días más a ver algún pueblo de alrededor ya que hacer un viaje únicamente a Hannover puede saber a poco y una escapada a alguno de los pueblos cercanos es un perfecto complemento. Nosotros fuimos a Celle, Hamelín, Goslar y Hildesheim.
Si vas a hacer una visita a Hannover, lo más recomendable es que dediques un par de días más a ver algún pueblo de alrededor ya que hacer un viaje únicamente a Hannover puede saber a poco y una escapada a alguno de los pueblos cercanos es un perfecto complemento. Nosotros fuimos a Celle, Hamelín, Goslar y Hildesheim.
Lo mejor para visitar estos pueblos es
comprar el Niedersachsen-Ticket que te permite viajar por todo el Land (llega incluso a otras ciudades cercanas de otros estados como Hamburgo y Bremen) durante un día haciendo uso de
trenes regionales. El precio varía en función del número de pasajeros, siendo
23€ para uno y 5€ más por cada viajero que se añada –hasta un máximo de 5–, durante un día entero. El billete se puede comprar en las taquillas de las estaciones de trenes o por internet en la web de Deutsche Bahn.
Muy buen artículo sobre la ciudad! Aquí os dejamos más información sobre la línea roja de Hannover:
ResponderEliminarhttp://azucarundkalt.com/2015/04/25/el-hilo-rojo-de-hannover/
Gracias y pasaros por nuestro blog para conocer más curiosidades sobre esta ciudad!
Muchas gracias por vuestro comentario
EliminarSin duda sois mucho más expertos en Hannover, la próxima vez que volvamos por allí nos pasaremos por vuestro blog!
Un saludo