Bamberg

Bamberg es una ciudad de 78.000 habitantes situada en Franconia (Franken), una región del Land de Baviera, en Alemania.

Afortunadamente, Bamberg apenas fue dañada por la Segunda Guerra Mundial por lo que hoy en día sigue siendo una ciudad con mucho encanto, de las que aparecen en el top 10 de las guías de pueblos más bonitos de Alemania. Por eso merece una visita si estamos viajando por la zona: un día entero será suficiente para conocer Bamberg si bien también podemos aprovechar y combinarlo con una visita a la cercana ciudad de Würzburg en un fin de semana, dedicándole cerca de un día o día y medio a cada una. Cada año sus calles empedradas y sus coloridos edificios con tejados a dos aguas atraen a miles de visitantes.

El casco antiguo (Altstadt) de Bamberg, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1993, se puede recorrer tranquilamente andando y se encuentra a unos 15 minutos a pie desde la estación central de trenes y autobuses.

Una curiosidad es que, si ya los habitantes de Baviera suelen tener un acento muy marcado al hablar, en Franconia predomina un dialecto realmente ininteligible, el llamado fränkisch, sobre todo para nuestro nivel estándar de alemán.

Calle Grüner Markt - casco antiguo de Bamberg

¿Qué ver en Bamberg?

Lo primero que buscaremos será la imagen más famosa de Bamberg, la que sale en todas las postales de la ciudad. Esta corresponde con la vista del Antiguo Ayuntamiento (Altes Rathaus), el cual se encuentra en una pequeña isla rodeada por el río Regnitz. La instantánea que buscamos se obtiene desde un puente cercano llamado Geyerswörthsteg, desde donde veremos el río, el puente Obere Brücke y el Ayuntamiento. Si tenéis ocasión, también merece la pena pasarse por la noche y ver la escena iluminada.

El Antiguo Ayuntamiento, que data del año 1386, pertenece actualmente al Museo de la Ciudad de Bamberg (Museen der Stadt Bamberg) y alberga una exposición de porcelana (Sammlung Ludwig Bamberg). Lo que más llama la atención es la casa de entramado de madera que hay adherida a la torre del puente. Se conoce como Rottmeisterhäuschen y servía como residencia de los guardias que vigilaban el edificio.

Antiguo Ayuntamiento de Bamberg

A orillas del mismo río Regnitz encontraremos la denominada Pequeña Venecia (Klein Venedig). Así es como se conoce hoy en día a un antiguo barrio de pescadores que consta de una serie de edificios residenciales en hilera cuyas fachadas miran al río y que datan del siglo XVII. 

Durante la Sandkerwa, un festival folclórico que se celebra anualmente en agosto aquí en Bamberg, frente a la Pequeña Venecia tiene lugar el famoso Fischerstechen, traducido como “el apuñalamiento del pescador”, una competición entre pescadores en la que se tienen que tirar de sus barcas los unos a los otros con ayuda de sus remos. 

Callejeando por el casco antiguo, pasaremos también por la Maximilianplatz (o Maxplatz como la llaman coloquialmente aquí). Es la plaza más importante de la ciudad y lugar donde se celebra el principal mercadillo de navidad de Bamberg cuando llega el invierno. En los alrededores de la plaza, principalmente en la calle Grünen Markt, todos los sábados por la mañana tiene lugar un “mercado de agricultores” (Bauernmarkt) en el que, como su propio nombre indica, los agricultores venden todo tipo de alimentos provenientes de la región: carnes, embutidos, quesos, verduras, frutas y demás. También hay una versión más reducida de este mercado por las mañanas entre semana (Wochenmarkt), si bien no tiene tanto ambiente como el de los sábados.

Ahora subiremos a la parte más alta de la ciudad para ver la Catedral de Bamberg (Bamberger Dom), dedicada a San Pedro, San Pablo y San Jorge. Arquitectónicamente hablando, estamos probablemente ante la edificación más llamativa de la ciudad. La primera catedral se construyó en el año 1012 aunque, tras un incendio, tuvo que ser reconstruida un siglo más tarde y reformada en el siglo XIII en estilo románico-gótico.

Forma parte del grupo de las llamadas catedrales imperiales (Kaiserdome) que guardaban relación con el Sacro Imperio Romano Germánico. El acceso a la catedral es gratis y los horarios están en su página web.

Catedral de Bamberg

Frente a la catedral veremos otro majestuoso edificio: la Nueva Residencia (Neue Residenz). Se construyó en 1602 como alojamiento de los príncipes obispos de la ciudad y a partir de 1803 sirvió como residencia real. 

La Nueva Residencia solo se puede visitar con un tour guiado, si bien este solo está disponible en alemán o con hojas informativas en inglés. El plato fuerte del recorrido es la espectacular Kaisersaal. Aquí tenéis los horarios y precios.

Independientemente del acceso al interior de la residencia, se pueden visitar también –en este caso gratis– sus jardines (Rosengarten der Neuen Residenz), con vistas sobre la ciudad incluidas. 

Edificio de la Nueva Residencia

Seguimos en la plaza Domplatz donde ya hemos visto la Catedral y la Nueva Residencia. El otro edificio que delimita la plaza es el Museo Histórico de Bamberg (Historische Museum Bamberg), donde se documenta la historia de la ciudad desde la prehistoria hasta la actualidad. Salvo que alguien tenga especial interés o goce de muchos días en la ciudad, no es una atracción imprescindible. 

¿Dónde comer en Bamberg?

Estamos en Baviera, sinónimo de comer mucho y bien. Aquí predominan los platos de carne y vamos a recomendar dos característicos de Bamberg, que no se encuentran en otros lugares:

• Bamberger Zwiebel: similar a una albóndiga de carne picada pero envuelta dentro de la piel de una cebolla. Suele venir acompañado de puré de patatas y salsa.

• Schäuferla: codillo de cerdo acompañado de una bola de patata (Kartoffelknödel) y chucrut (Sauerkraut). Este plato sí lo podemos encontrar en una u otra variante en toda Baviera. 

Obviamente no podemos pasar por alto lo mucho que gusta la cerveza en Baviera y Bamberg no es una excepción. Aquí veremos varias cervecerías clásicas alemanas pero vamos a recomendar una especialmente famosa en Bamberg: la histórica Schlenkerla, situada en pleno centro. Aquí, además de poder probar los platos anteriormente mencionados, debéis degustar la cerveza ahumada (Rauchbier) característica de este lugar. A nosotros en particular no nos gustó mucho pero ya veréis como todo el mundo la bebe y os animaréis a probarla.

Para salir a tomar algo por la noche, la zona de bares se concentra en torno a la calle Obere Sandstraße.

Más alternativas

Fuera del casco antiguo, aunque alcanzable a pie, se encuentra el Monasterio de San Miguel (Kloster Michelsberg), una abadía benedictina. Actualmente y desde hace ya varios años se encuentra en proceso de rehabilitación y está en obras. El complejo es enorme, por lo que imaginamos que una vez finalice la renovación será una visita fundamental.